Seguramente muchos de nosotros estamos familiarizados con el término de reciclaje, aunque más allá de reordenar la basura hogareña, no sepamos bien cómo son los procesos a gran escala. Pues aquí tienes la posibilidad de realizar en tu propia casa el reciclado de papel, en pocos y fáciles pasos, sin gastar mucho dinero, y ayudando al medioambiente. Aunque claro, lo harás sin utilizar productos tóxicos, como las grandes compañías que reciclan papel de manera industrial. Por esta sencilla razón, el papel que recicles no será de un blanco supremo como el de los cuadernos y hojas de impresión, aunque de todas maneras podrá servirte a fines de escritura y dibujo.
Cómo reciclar el papel
Lo primero que debes saber es que todo lo que necesitas está al alcance de tu mano en tu propia casa. Elementos tales como una buena cantidad de papel, un recipiente lo bastante grande, una batidora preferentemente eléctrica, escurridor, un bastidor con rejilla y por último, algunas telas. Empiezas por cortar el papel que tengas, ya sean hojas de computadora, de revista o de diario, y una vez cortados en pedacitos pequeños, procedes a volcarlos sobre un pote con agua caliente, intentando que la proporción sea dos veces agua por papel. Procedes a batir y lo que obtendrás es una pasta uniforme. Debes dejarla reposar, pasarla por suficiente agua tibia o fría para aclarar la consistencia, y escurrir. Dicha pasta será puesta sobre una tela y se dejará secar por lo menos un día, para luego ser retirada y utilizada como nuevo papel.