Llega el momento de ser padres y no tienen idea de los cuidados que necesita un bebé, sobre todo su piel, la cual es una piel muy delicada y que necesita de muchos cuidados, es la barrera de protección que tenemos todos contra las agresiones del medio ambiente, es un 40 o 60% más delgada que la de un adulto, debido a su alta permeabilidad es mucho más sensible al nivel de toxicidad de ciertos ingredientes que contienen las cremas, ungüentos y pomadas, además de que no tienen film hidrolipídico, el cual es la capa de agua y grasa que sirve como sistema de defensa contra la deshidratación, tomando en cuenta estas razones en esta ocasión vamos a darte unos consejos para cuidar la piel de tu bebé.
¿Cómo cuidar la piel de tu bebé?
Existen en el mercado gran diversidad de productos dedicados al cuidado de la piel de los bebés con fórmulas específicamente diseñadas para su tipo de piel y que además son hipoalergénicos y no contienen alcohol ni parabenos.
El primer consejo es que debemos bañarlos diario con un shampoo o jabón especial para bebés, sin tallar su piel ni su cabeza, con movimientos suaves y agua tibia, en caso de que sea un bebé recién nacido, los baños deberán ser breves y evitar tener sumergido al pequeño por más de 15 segundos.
Una vez bañado el bebé hay que quitar el exceso de agua con una toalla y secar perfectamente los pliegues es decir de tras de las rodillas, en el área genital, por los codos, cualquier pliegue que se le forme en su cuerpecito, secarlo muy bien para evitar formación de infecciones aparición de hongos por la humedad, y les ponemos crema humectante especial para bebés en todo su cuerpo.
Se les debe cambiar frecuentemente el pañal, pues el área donde va requiere especial cuidado, ya que la humedad y las heces fecales llegan a ser muy irritantes y ácidas, en cada cambio de pañal es recomendable aplicar alguna pomada protectora y reparadora para evitar las rozaduras.
Espero estos consejos les sean de gran ayuda y los lleven a la práctica cuando tengan a sus hijos, ya que es importante cuidar su piel que es más delicada que la de un adulto.
