En los tiempos que corren hay todo un abanico de posibilidades en lo que a hacer ejercicio se refiere: gimnasios, aeróbic, fitness, andar en bicicleta…
Si tienes una agenda muy apretada y no puedes hacer nada de eso por falta de tiempo desde aquí te proponemos adelgazar sin hacer ejercicio. Te estás preguntando cómo?
Sustituyendo el ejercicio físico por la actividad física. El ejercicio físico es una actividad física programada con finalidad de mantener o mejorar nuestra condición física; en cambio, la actividad física comprende todos los movimientos corporales que provocan una gasto calórico superior al que tenemos en reposo, es decir, todas las actividades que realizamos en nuestra vida cotidiana.
Aquí es cuando entran en juego una serie de hábitos saludables que hay que arraigar si queremos cuidar nuestra salud a la vez que adelgazamos. Te recomendamos algunos de ellos:
- Utilizar las escaleras en lugar del ascensor o las escaleras mecánicas.
- Cubrir los pequeños desplazamientos a pie en detrimento del coche.
- Buscar actividades de ocio que nos mantengan activos físicamente, dejando de lado el ordenador, televisión, videojuegos…
- Aprovechar cualquier oportunidad para salir de casa y dar un pequeño paseo con la excusa de tirar la basura o pasear a nuestra mascota.
Todas esas costumbres y las que se os puedan ocurrir tienen un sinfín de beneficios, entre los cuales se encuentran:
- Mejoría de la circulación y disminución de la presión arterial.
- Disminución de la grasa corporal y aumento de la resistencia a la fatiga.
- Mejoría de la capacidad pulmonar.
- Tonificación de los músculos y mejoría de los reflejos y la coordinación.
- Prevención del sedentarismo, que puede acabar ocasionando obesidad.
